Por José CastilloPor José Castillo Resulta inexplicable, contraproducente, abusivo y hasta cantinflesco, algunas de las situaciones que se presentan a la hora de usted hacer algunos trámites para conseguir ciertos documentos, en nuestro querido país.
En esta ocasión nos referiremos a la renovación de una licencia vencida, pero que usted ha perdido el plástico vencido.
En la mayoría de los países desarrollados y no tan desarrollados, renovar una licencia consiste en conseguir un documento actualizado, ósea que tenga vigencia, cosa que en el último punto no difiere en República Dominicana respecto a otros países.
El asunto se pone “interesante” y repugnante, cuando usted llega a renovar su licencia vencida, pero que no lleva el plástico vencido, o lo boto… En fin que no lo tiene, y en las oficinas del Instituto Nacional de Transito y Transporte Terrestre (INTRANT) le dicen que sino tiene el plástico (vencido) tiene que pagar por la impresión de un duplicado.
Siiii, un duplicado vencido, por eso tiene que pagar, porque ellos alegan que usted tiene que llevar la licencia vencida, o pagar por la impresion de un duplicado.
La cosa se pone más inquietante cuando usted pregunta el porque del plástico vencido, el porque de la importancia, el para qué sirve, y solo le dicen que hay que entregarlo, para qué, ni ellos saben (lanzarlo al zafacon).
La verdad es que para la impresión del famoso duplicado vencido, usted tiene que pagar un impuesto de casi dos mil pesos, en RD y si es en New York tiene que pagar 70 dólares, por un plástico que ellos tirarán a la basura, pero “hay que recaudar”.
Hasta para robar, hay quienes tienen cierta delicadeza.
Fisuras como estas, tienen que llamar la atención de las autoridades competentes, y se tienen que ir cerrando, para que se solucionen, porque es bastante incómodo, con serios sentimientos de impotencia y decepción, que te traten de una manera tan estúpida, solo por recaudador “unos pesos”.